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Primark comprará el Palacio de la Bolsa de Madrid para abrir una macro tienda

Primark comprará el Palacio de la Bolsa de Madrid para abrir una macro tienda
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Colaborador Senior
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Bolsas y Mercados Españoles, a falta de confirmación oficial, venderá el Palacio de la Bolsa de Madrid, punto en el que abrirá una gran tienda de Primark para cerrar la expansión de la irlandesa en la Comunidad de Madrid.


La Bolsa de Madrid podría incorporar en los próximos meses un nuevo actor a su ecosistema, aunque no cotizado. El grupo textil irlandés Primark estaría ultimando un acuerdo para abrir una macro tienda en el Palacio de la Bolsa, una operación que, de confirmarse, supondría el cierre definitivo de su plan de expansión física en la capital española y, por otro lado, la clausura para el actual uso informativo y de seguimiento bursátil del icónico edificio.


Según fuentes próximas a la negociación, el proyecto se enmarca dentro de una estrategia de optimización de activos inmobiliarios singulares, impulsada por Bolsas y Mercados Españoles (BME), que busca maximizar la rentabilidad de determinados espacios infrautilizados del edificio sin alterar el normal funcionamiento del mercado secundario de renta variable, el cual, como hasta ahora, seguirá centralizado en materia informática en su sede a las afueras de la capital española.


La tienda ocuparía una superficie cercana a los 4.000 metros cuadrados, distribuidos entre la planta baja y varias dependencias adyacentes al histórico parqué. La zona central, donde tradicionalmente se han concentrado los corros y actos institucionales, se mantendría estructuralmente intacta, aunque adaptada a un nuevo flujo de tránsito comercial.


Fuentes técnicas aseguran que el rediseño respetará las pantallas de seguimiento bursátil donde se pueden ver las cotizaciones en tiempo real. El concepto será innovador: “el cliente podrá ver la cotización de PharmaMar, Telefónica o Banco Santander mientras los precios de los productos se mostrarán junto a los valores del mercado”, dice un responsable de la empresa irlandesa.


Desde el punto de vista corporativo, la elección del Palacio de la Bolsa responde a criterios tanto de visibilidad como de posicionamiento estratégico. Primark considera que su presencia en un enclave financiero de primer nivel refuerza su narrativa de acceso masivo al consumo en un contexto de inflación persistente y presión sobre la renta disponible de los hogares. Se trata además de la llegada a una de las zonas culturales y más luminosas de Madrid, entre Cibeles y la estación de Atocha, junto a los principales museos del país.


El acuerdo, a punto de cerrarse, sería millonario: Primark habría pagado 120 millones de euros por el Palacio. “No se trata solo de varios millones de euros, sino de rentabilizar el flujo”, señalan fuentes del sector inmobiliario, que destacan la elevada correlación entre jornadas de alta volatilidad y el aumento del tráfico peatonal en el entorno financiero.


Se estima que la nueva tienda permitirá la creación de entre 250 y 300 empleos directos, además de un efecto arrastre sobre servicios auxiliares. Algunos analistas apuntan a que la operación simboliza la convergencia entre economía financiera y economía real en un momento de creciente desconexión entre mercados y consumo.


En clave bursátil, el desembarco de Primark ha sido recibido con comentarios irónicos entre operadores. “Por fin un producto con rotación diaria garantizada”, señalaba un trader veterano, mientras otro apuntaba que “la volatilidad implícita de una camiseta básica es más predecible que la de algunos small caps”.


El proyecto contempla incluso una línea exclusiva de productos inspirados en la jerga del mercado, bajo el nombre provisional de “Parqué Series”, con referencias a gráficos de velas, soportes, resistencias y estrategias de largo plazo. No se descarta la instalación de cajas de autopago junto a antiguos paneles de cotizaciones hoy ya en desuso y que, por ejemplo, el salón de los Pasos Perdidos se convierta en los probadores.


Desde BME, oficialmente, se limitan a señalar que “se analizan continuamente fórmulas para poner en valor el patrimonio inmobiliario del grupo”, sin confirmar ni desmentir la operación. La inauguración se situaría, según el calendario preliminar, en el segundo semestre de 2026, una vez superados los trámites regulatorios y las adaptaciones técnicas del inmueble.